Nadie sabe
que sin todo ese dolor
su resplandor no existiría
y cada lapso de tiempo que derrama
estremeciendo con su sonrisa al mismísimo vacío
o estallando al miedo con su indefectible luz
da sentido a la espera...
si supieran
que el ardor dulce de este insomnio
es verla ígnea como un fénix
eclipsando la oscuridad.
No hay comentarios:
Publicar un comentario